Una protección oclusal a menudo se denomina protección nocturna o protección contra el bruxismo. Protege contra el bruxismo, que es el apretar o rechinar los dientes que ocurre principalmente por la noche. Debido a que la mandíbula ejerce una cantidad extrema de presión por pulgada cuadrada sobre los dientes, rechinar y apretar la mandíbula por la noche puede provocar daños en los dientes y síntomas dolorosos de la ATM o trastorno de la articulación temporomandibular. Los protectores oclusales pueden ser hechos a medida por un dentista para que se ajusten exactamente a la boca del paciente, o se pueden comprar sin receta. Si bien los protectores oclusales de venta libre son menos costosos que los hechos a medida, pueden tener un impacto negativo en la salud bucal si no se usan correctamente. Los protectores oclusales hechos a medida brindan a los pacientes un mejor alivio del bruxismo sin la incomodidad de las piezas de plástico o metal que no se ajustan bien y que son de talla única. Los protectores oclusales pueden prevenir la tensión de la mandíbula, la fatiga, el dolor y el astillado o la rotura de los dientes.

Para evitar más daños por apretar y rechinar, y para aliviar los síntomas de dolor en la mandíbula y la ATM, se requiere un protector muy preciso y hecho a la medida. Este protector de mordida se construirá con propiedades específicas e individualizadas para tratar sus síntomas. El protector de mordida se usa en los dientes superiores o inferiores y está hecho de un material acrílico híbrido que es más suave por dentro y más duro por fuera. Es un proceso de dos visitas para crear el protector de mordida de cada paciente.

Quizás se esté preguntando si necesita un protector oclusal o un protector nocturno. Si bien rechinar o apretar los dientes de vez en cuando no debería ser una causa importante de preocupación, el bruxismo constante a largo plazo puede provocar dolor, dientes rotos, pérdida del esmalte dental y, en casos graves, la pérdida de los dientes. Para estas personas que experimentan bruxismo de moderado a severo, un protector oclusal podría ser muy beneficioso para la salud bucal.

El bruxismo es un problema bastante común. Se estima que alrededor del 10 por ciento de los adultos y hasta el 15 por ciento de los niños se ven afectados.3 Este rechinar y apretar normalmente ocurre por la noche, pero también puede ser un hábito durante el día, y la mayoría de las personas no saben que tienen el problema. A menos que su compañero de sueño se queje del ruido, su dentista suele ser el primero en reconocer el daño en sus dientes y plantear su preocupación.